sábado, 10 de enero de 2009

martes, 6 de enero de 2009

La ventana de Miguel

A eso de las 18,15, a muy poca distancia de la línea del horizonte, el cielo desgarró el vientre de los oscuros nubarrones en una gigantesca grieta de varios kilómetros de largo y más de trescientos metros de ancho. A través de ella, como sangrando luz, El Sol despidió el día tiñendo de rojo incandescente todo aquello que lo contemplaba.Después,el gris Océano engulló lo que quedaba de tarde en un majestuoso anochecer.

Panxón,6 de Enero del 2009.